• La manzanilla (Matricaria recutita) es una planta herbácea que se ha utilizado durante siglos para tratar distintas dolencias.
• ​Actualmente, se sigue utilizando su parte floral para poder obtener un extracto con propiedades carminativas y colagogas en el sistema digestivo.

En gatos y perros, la manzanilla puede ayudar a los problemas digestivos como la indigestión, la diarrea o el restreñimiento.

Su acción colagoga contribuye a estimular y mejorar la digestión y así aliviar las molestias estomacales.
Y su acción carminativa actúa aliviando los gases. En este caso, la manzanilla contiene compuestos antiflatulentos como el alfa-bisabolol y el acetato de linalilo, que actúan conjuntamente para favorecer la liberación de estos gases intestinales, al mismo tiempo que ayudan a aliviar las molestias causadas por la distensión intestinal por la propia acumulación de gases.

Gracias a estas dos propiedades, a la manzanilla también se le confiere acción antiinflamatoria y antiespasmódica.

Por todo esto, es ideal añadir extracto de manzanilla en el alimento de la mascota ya que puede mejorar la salud digestiva.

Otras propiedades que se le atribuyen al extracto de la manzanilla es una cierta acción para relajar y reducir el estrés y nerviosismo de la mascota.